Luna y la "madre" compradora que no la quería No había ningún vínculo entre la mujer "comisionista" y el niño nacido de una madre subrogada. Por rivalidad "envidiosa" hacia la madre que la parió. Y porque si compras un niño como una cosa, siempre puedes desecharlo. Este caso es sólo la punta del iceberg de la compleja dinámica relacional que se desencadena cuando se recurre a esta práctica. Y siempre son los niños los que pagan el precio más alto.
Luna, nacida a través de un vientre de alquiler, es una niña perfectamente sana. Los "padres intencionales" (como se suele llamar a los padres de alquiler) suelen tener dudas cuando el niño nace con una discapacidad. Hace unos años se produjo el famoso caso de Gammy, con síndrome de Down y una malformación cardíaca, que nació de una "madre de alquiler" tailandesa. Los comisarios australianos sólo recuperaron el "producto perfecto", un gemelo sano, descartando al hermano pequeño defectuoso. A pesar de las dificultades financieras (de lo contrario no habría prestado [...]
