La Coalición Internacional para Abolir la Gestación Subrogada (ICASM) organizada para el 13 de noviembre a acontecimiento internacional frente al Conferencia de La Haya de Derecho Internacional Privado (HCCH) oponerse a la regulación de los "vientres de alquiler" transfronterizos.
De hecho, se está intentando imponer una regulación internacional sobre la llamada "maternidad subrogada": a partir del 13 de noviembre, la HCCH creará un grupo de trabajo con la tarea de redactar un convención para permitir el reconocimiento transfronterizo de los contratos. Se trata de satisfacer la creciente demanda de reproducción humana artificial en el biomercado globalizado.
Le Asociaciones feministas y de defensa de los derechos de la mujer ICASM, junto con los 8.000 firmantes de las peticiones lanzadas por la ICASM, piden a los Estados miembros de la HCCH que no sacrifique la dignidad humana por el biomercado de la reproducción y tener el valor de abolir la compraventa de niños, hipócritamente denominada "gestación subrogada". Violencia contra los niños, contra las mujeres que los traen al mundo y contra la humanidad en su conjunto.
Gracias al compromiso de ICASM desde hace tiempo, el anuncio del acontecimiento creó un contexto a través del cual la Secretaría General propuso una reunión. Por ello, Marie-Josèphe Devillers y Ana Luana Deram, copresidentas de la ICASM, recibirán hoy, 9 de noviembre, al Secretario General y a los miembros de la Oficina Permanente.
ICAMS reiterará que algunos derechos reclamados no existenHoy, más que nunca, hay que afirmar con rotundidad que no hay derecho a un hijo para nadie y que los niños no deben ser arrancados de sus madres; que la "maternidad subrogada" es sólo la compra y venta de niños y niñas que sean objeto de un contrato; que los "padres" que los encargan también pueden rechazarlossi no cumplen sus expectativas.
Apoyamos este importante acontecimiento en el que participarán mujeres de varios países (yo estaré presente como representante italiana).
Le seguirá reportaje sobre el acontecimiento.
Silvia Guerini